Hoy he tenido mi tercer día de universidad, y me he dado cuenta de lo dura que es la vida. No es por exagerar pero mantener hora y media mi atención puesta en una asignatura totalmente ajena a mi orientacion profesional me ha sido muy difícil, y mas si a la vez de atender al profesor he de tomar apuntes, supongo que con el tiempo me acostumbraré, ¡espero!...
A medida que pasan los días voy conociendo mas gente y me voy haciendo con la vida universitaria.
En cuanto a mis pensamientos, no pueden dejar de estar dirigidos a cierta persona, nunca pensé que el olvidar fuese tan difícil, la paradoja es que deseo encontrarme con él. Sentimientos complicados para una mente tan joven.
Por otro lado me he dado cuenta de que las pastillas de la felicidad empiezan a hacer efecto en mi organismo, poco a poco se va progresando, aunque sea con ayuda química, parece que la monotonía y ellas me están dando un empujoncito hacia mi estabilidad física y emocional.
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